P. ¿Cómo lidiar con un niño que no quiere un hermanito o hermanita? Nate, nuestro precise y único hijo, tiene cuatro años. Cuando le dijimos a Nate que íbamos a tener un bebé, dijo: “Odio al bebé. No quiero uno.” Le hemos dicho a Nate lo buen hermano mayor que será y lo importante que es. ¿Qué más podemos hacer?
R. Nate no es el único que reacciona así. Un hijo único está acostumbrado a recibir toda la atención de sus padres. Puede ser difícil para un niño pensar en compartir todo ese amor. Aquí tiene algunas sugerencias para ayudar a Nate a adaptarse a la llegada de un nuevo hermanito o hermanita.
- Pídales a familiares y amigos que traigan un pequeño regalo para Nate si van a traer uno para el bebé. Podría ser un libro económico para leer o una actividad para hacer. Puede ser un juguete pequeño. Si gustan envolverlo como un regalo, igual que se envuelve el regalo del bebé. Esto sugiere que tener un nuevo bebé tiene sus ventajas. También ayuda a consolidar la posición de Nate como un miembro importante en la familia.
- Pida ayuda de familiares y amigos para explicarle a Nate lo buen hermano mayor que será. Esto refuerza lo que ya le ha dicho.
- Intente no desviarse del horario de Nate antes y después de la llegada del bebé. Esto incluye cosas como la hora de la comida, la de los cuentos para dormir y la hora de acostarse. Si la abuela va a encargarse de esto después de la llegada del bebé, entonces pídale que haga algunas de estas rutinas con Nate antes de la llegada del bebé. Puede colgar el horario de Nate en un tablón de anuncios, una cartulina en su puerta o en el refrigerador. Si tiene que desviarse, pídale ayuda a Nate.
- Deje que Nate le ayude con el bebé en tareas que sean apropiadas para él, como ir a buscar y traer cosas que necesita. Dele a Nate muchos refuerzos positivos cada vez que le ayude con el bebé.
- Pídale consejo a Nate. ¿Crees que al bebé le gustaría usar el conjunto amarillo o el azul?
- Programe tiempo especial a solas para Nate con ambos padres.
- Léale libros a Nate sobre cómo ser un hermano mayor. Hay muchos libros para elegir, como: “¡Soy un hermano mayor!”, o “¡Soy una hermana mayor!”, de Caroline Jayne Church. Otros libros incluyen, “You’re the Greatest” de Lucy Tapper y “Large Brothers are the Finest” de Fran Manushkin.
Los niños tienen diversas reacciones ante un nuevo hermano. Algunos niños lo sobrellevan ignorando al bebé. Algunos hermanos o hermanas mayores retroceden y hacen cosas como querer un biberón. Por lo normal, funciona bien simplemente esperando a que cambie el comportamiento mientras le da a su primogénito un poco de gracia y atención especial.
Betty Richardson, PhD, RN, CS, LPC, LMFT, is an Austin-based psychotherapist.
